Energía Eólica


 Energía Eólica



La energía eólica es la que más futuro parece tener de todas las renovables, junto con la energía solar. Se pueden utilizar, igual que la energía solar fotovoltaica, para generar electricidad doméstica en zonas aisladas donde no existe conexión a la red  nacional, o para vender a la compañía eléctrica.
La energía eólica consiste en generar electricidad mediante unos molinos de viento que mueven una turbina. Se consigue gracias a la energía cinética que produce este movimiento. Cuando el viento sopla a doble velocidad, se genera ocho veces más energía. La potencia del generador está en función de la longitud de sus aspas, a mayor longitud, se consigue mayor potencia y consecuentemente, mayor generación de electricidad. El tamaño de los aerogeneradores puede ser muy variable, existiendo unidades que van desde los 400W y un diámetro de aspas de 3 m. hasta los aerogeneradores comerciales instalados por las grandes empresas como Iberdrola, que llegan a los 2,5 MW de potencia y 80 m de diámetro de aspas. Soliclima instala únicamente los aerogeneradores digamos domésticos, utilizados únicamente para generar electricidad de autoconsumo, de 400W a 3,2 KW de potencia, que aprovechan vientos de baja intensidad.
Todo aerogenerador necesita una velocidad mínima de arranque, que es de 11 km/h en este tipo de aerogeneradores. Su mayor productividad es con vientos que ronden los 45 km/h, pero paralizan su funcionamiento cuando los vientos llegan a los 100 km/h para evitar dañar la máquina. La utilización de este tipo de energía compensa únicamente en regiones muy ventosas, con viento casi todos los días del año y una velocidad media superior a los once km/h mencionados como el mínimo para que el aerogenerador empiece a funcionar. Es bastante común combinar este tipo de energía con energía solar fotovoltaica, puesto que las condiciones meteorológicas necesarias para ambas tecnologías son complementarias. Sol y viento conjuntamente no suelen combinarse a menudo.

Componentes de un sistema eólico para autoconsumo

El aerogenerador tiene usualmente tres aspas en conexión a un rotor que hace funcionar un generador eléctrico. Esto es el que vemos situado en la parte superior del mástil de un típico aerogenerador.

Historia de la energía eólica

El primer uso que se conoce del aprovechamiento del viento data del año 3.000 a.C. con los primeros barcos veleros egipcios. Unos milenios más tarde (s. VII en Persia) surgirán los primeros molinos de viento que permitirán moler grano o bombear agua.
A Charles F. Brush (1849-1929), uno de los fundadores de la industria eléctrica americana, le debemos la primera turbina eólica para generación de electricidad. Era un gigante de 144 palas fabricadas en madera de cedro. funcionó durante 20 años y cargó las baterías en el sótano de su mansión. Durante la segunda guerra mundial, una compañía danesa empezó a fabricar aerogeneradores bi y tripala, y en los años 50 aparecieron, las primeras turbinas de corriente alterna.
La primera crisis del petróleo (1973) generó un interés real por la energía eólica. La generación de aerogeneradores de 55 KW de 1980 supuso, el boom industrial y tecnológico para los aerogeneradores modernos.

Futuro de la energía eólica

De acuerdo con los objetivos en energía eólica, sitúa su objetivo de incremento en 12.000 MW adicionales en el periodo 2005-2010, el que supone finalizar en 2010 con una potencia total instalada de 20.155 MW. Los objetivos eólicos por comunidades son muy esperanzadores para esta tecnología: Comunidades de Andalucía (4.000 MW en el 2010), Catalunya (3.000 MW en 2010), Castilla-León (6.700 MW en 2010), Galicia (6.300 MW en 2010), Castilla-La Mancha (4.450 MW en 2011), Aragón (4.000 MW en 2012), Canarias (893 MW en 2010), y la Comunidad Valenciana (2.359 MW en 2010).

Ventajas de la energía eólica

  • Renovable, es decir, inagotable.
  • No emite contaminación
  • Ecologia
  • Recibe subvenciones

Otras aplicaciones de la eolica doméstica

Otro uso de la energía eólica, es el de molino. Un aerogenerador se conecta directamente a una carga, sustituyendo su generador eléctrico, y su función más tendido es el bombeo de agua. Estos molinos constan de muchas palas, de 15 a 40, que consiguen aprovechar mucho mejor el viento a bajas velocidades. Arrancan desde los 4,8 km/h hasta los 28 km/h, manteniendo una capacidad de rotación constante interesante para tener una cantidad de agua continua, aprovechando tanto los vientos fuertes como los débiles y evitando instalar grandes depósitos de agua.